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Cofradía de la Negritud - CONEG
Desde la Ceiba
Nº 144, jueves 13 de marzo de 2014
Si la cultura es el conjunto de comportamientos motores y
mentales nacidos del encuentro del hombre con la naturaleza y con sus
semejantes, se debe decir que el racismo es verdaderamente un elemento
cultural. Hay pues culturas con racismo y culturas sin racismo.-- Frantz
Fanon
Sumario
- Cuba insurgente Raza, nación y
revolución 1868-1898, de Ada Ferrer: una contribución a la escritura de
una historia afrocubana. Por Alberto Abreu Arcia
- La historia como asunto cotidiano (Análisis de
"1912. Voces para un silencio", un documental de Gloria Rolando) Por
Dean Luis Reyes
- Cuba a todo color por Ernesto Pérez Chang
- Rotundamente Negra por: Shirley Campbell
- Eloy Machado: "El Ambia", Poeta Oficial. (Croniquilla desde el fondo del
caldero) por Tato Quiñones
- Invitación del Capítulo cubano de la Articulación
Regional Afrodescendiente para América Latina y el Caribe (ARAAC) 18
de marzo, 2014
- Convocatoria al VII Coloquio Internacional sobre Investigaciones de las
Religiones Afroamericanas. "Jesús Rafael Robaina Jaramillo"
21 al 23 de mayo del 2014.
- Racismo en Alemania por Rosalía Sánchez
- Mensajes recibidos en "Desde La Ceiba
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Cuba insurgente Raza, nación y
revolución 1868-1898, de Ada Ferrer
Nota del Editor: En la entrega N° 139 de "Desde La Ceiba",
correspondiente al lunes 17 de febrero pasado, dimos a conocer el artículo
"Cuba insurgente Raza, nación y revolución 1868-1898: una contribución a
la escritura de una historia afrocubana", reseña crítica de Alberto Abreu
Arcia, sobre el libro de la historiadora cubana Ada Ferrer, publicado por
la Editorial de Ciencias Sociales en el 2011. El texto nos llegó trunco y,
aunque así nos lo pareció, así lo publicamos. Días después, el compañero
Abreu no hizo llegar una breve nota -que a continuación reproducimos-- en
la que explica el desacierto:
Estimado Tato:
Mi reseña sobre el libro de Ada Ferrer: Cuba insurgente..., apareció
publicada en La Ceiba de manera inconclusa. Quizás el error fue mío al no
aclarar que se trataba de una invitación para entrar al blog y leerlo.
(Que ingenuidad la mía. Como si esto nos fuera tan fácil). Por estos
motivos, aquí te envío el texto tal y como lo publiqué en
Afromodernidades. Un abrazo,
A.
A propósito de lo escrito por Alberto, el compañero Oscar Zanetti Lecuona
nos hizo llegar un también breve comentario crítico que compartimos con
ustedes:
Estimado Tato: La calidad del libro de Ada esta fuera de cuestión y la
pude apreciar casi desde su origen, pues tuve la oportunidad de recibirla
en el Instituto de Historia hace 20 años, cuando vino a recoger la
información de su tesis doctoral, finalmente convertida en Cuba
insurgente. Después tuve la oportunidad, junto a Fernando Martínez de
promover su edición cubana. No es ese el asunto. De lo que se trata es que
Abreu con su comentario, quizás de manera inconsciente, demerita a la
historiografía cubana. Saludos,
Zanetti
Cuba insurgente Raza, nación y revolución 1868-1898, de
Ada Ferrer: una contribución a la escritura de una historia afrocubana
por Alberto Abreu Arcia
Cuba insurgente Raza, nación y revolución 1868-1898, de
Ada Ferrer constituye un libro excepcional, y, al mismo tiempo, de
ineludible lectura para entender los intersticios y el accidentado
itinerario de ningoneos, exclusiones, alianzas rotas, traiciones y las
promesas abolicionistas aplazadas por las que atravesaron negros y mulatos
en las luchas insurreccionales contra el colonialismo español.
Su autora nació en Cuba, y ha vivido la mayor parte de su vida en Estados
Unidos, país donde se formó intelectualmente. Este dato no es gratuito.
Este hecho, indiscutiblemente, dota su estudio de una perspectiva y marcos
analísticos poco usuales dentro del discurso historiográfico cubano,
descontaminada de cualquier tipo de mediación (política, ideológica). De
ella ya había leído sus trascendentales investigaciones: "La societé
esclavagiste cubaine et la revolution haitenne", "Noticias de Haití en
Cuba", y "Cuba en la sombra de Haití: noticias, sociedad y esclavitud"
centradas fundamentalmente en uno de los grandes silencios de los estudios
historiográficos cubanos: la repercusión de la revolución haitiana en la
Cuba colonial y sus diferentes implicaciones en el campo de las
mentalidades y en la rearticulación de diferentes estereotipos,
categorías, y políticas de control racial.
La lectura de este volumen de más de trescientas cincuentas páginas, nos
permite asistir al verdadero origen histórico de un grupo de discursos y
prácticas decimonónicas que todavía hoy, en el siglo XXI, parecen
repetirse, y no precisamente como comedia. Uno de ellos es el manido
"argumento" de que hablar de negro/as y mutalo/as, como un cuerpo
diferenciado dentro de la sociedad cubana, podría poner en riesgo la
unidad de la Revolución o alberga las pretensiones de una "guerra racial".
Habría que volver sobre las páginas de Cuba insurgente…para constatar el
origen colonialista de dicho argumento. Cómo el mismo, a manera de leit
motiv, siempre hace su aparición en momentos muy singulares de nuestra
historia, y al mismo tiempo ha servido de pretexto tanto del colonialismo
español como de la élite criolla blanca para crear un sin número de
suspicacias que le permitan preservar sus privilegios: desde la revolución
haitiana, la Conspiración de la Escalera o, después del 68 para postergar
la abolición de la esclavitud, impedir el reconocimiento y ascenso de
importantes y destacados militares mambises negros y mulatos a quienes
tenían como "hordas salvajes negros asesinos con argollas en las narices",
así como para su exclusión como líderes políticos de la futura República.
Ada Ferrer, ofrece innumerables y desconsoladores testimonios en este
sentido. "Y a medida que la paz y la victoria empezaban a parecer
alcanzables o, incluso, inminentes, las preocupaciones muy cargadas de
racismo que motivaban el ejercicio del poder por hombre descalificados, se
tradujeron en ansiedades diarias relacionadas con las promociones y las
graduaciones en el ejército rebelde" (281).
Cuba insurgente Raza, nación y revolución 1868-1898 describe los
intríngulis y vericuetos de este fenómeno, ofrece enjundiosos análisis en
este sentido. Su mirada racial al interior de la República en Armas nos
conduce por las aguas turbulentas, los ningoneos, injusticias históricas,
manipulaciones, conveniencias políticas, económicas, de clase, ansias
racialmente hegemónicas que desde, la fragua misma de la nacionalidad
cubana, subyacen detrás del sosegado paradigma de una nación mestiza, o de
una Cuba sin razas, y el alto precio que ha tenido que pagar negro/as y
mulato/as por tan generosidad en aras del "bien común de una nación".
Cierto que a nivel metodológico y propositivo Cuba insurgente…, exhibe una
zona de evidente cautela, que intenta no contravenir determinados
presupuestos sacralizados por el nacionalismo cubano y la historiografía
tanto liberal burguesa como marxista. Evidente cuando anota: "El interés
de este estudio no consiste ni en recrear ni en derrumbar la saga
nacional, sino en ubicar las complicadas trayectorias nacionalistas, las
constates tensiones entre racismo y antirracismo, y las inconsistencias y
contradicciones que definieron el movimiento, en el escenario central del
desarrollo y la liquidación de la revolución" (13). O, cuando sostiene que
uno de los propósitos de su estudio es encarar las luchas independentistas
cubanas del siglo XIX como un proyecto antirracista y anticolonial, para
ello sitúa a las luchas insurreccionales en la manigua cubana como el
espacio donde se fragua una nación multirracial. Sin embargo, su disección
de este proceso, apoyada en innumerables fuentes, su apego a la
objetividad del dato, la honestidad de sus análisis terminan por volverse
contra este último presupuesto, ponerlo en dudas, problematizarlo,
haciendo emerger otra historia: la de un grupo racial que siempre le tocó
aplazar la radicalización de sus demandas emancipadoras, su lugar ganado
en la manigua contra el colonialismo español, primero ante el temor del
blanco a perder sus privilegios, y el miedo a la supuesta africanización
de la Isla. Posteriormente, por preservar la unidad de la lucha
insurreccional. Negros y mulatos optaron por anteponer el amor a la patria
a los problemas de su raza. Ese es uno de los correlatos que emanan del
libro de Ada Ferrer. Donde el amor a Cuba de negros y mulatos, la renuncia
sin medidas por la unidad y el bien común de la nación parece ser uno de
los gravámenes que pesa sobre el sujeto negro desde la fragua de esa
nacionalidad. Semejante bondad me deja un sabor agridulce en los labios. Y
me hace pensar en ella (la generosidad y el sacrificio por el bien común
de la nación) como otra más de las presuntas deudas que tiene la nación
cubana, en el presente, con este grupo racialmente subalterno y con sus
aspiraciones y proyectos de reivindicación y reconocimiento social,
histórico y político.
Son estas, entre otras razones, las que hacen de Cuba insurgente Raza,
nación y revolución 1868-1898 un libro clave para entender muchos nódulos
de la problemática racial cubana en el presente.
La historia como asunto cotidiano
(Análisis de "1912. Voces para un silencio", un documental de Gloria
Rolando)
Por Dean Luis Reyes
En 2012, y como parte de las conmemoraciones por el
centenario de la "Guerrita de 1912", el segundo capítulo de la serie 1912:
voces para un silencio, de Gloria Rolando, fue exhibido en la televisión
cubana. Ello, dentro de un programa de información y discusión como es la
Mesa Redonda de Cubavisión.
Tratándose este de un espacio que habitualmente aborda temas de política
exterior y doméstica del país, se trató del reconocimiento de la
pertinencia de semejante asunto entre las cuestiones de más alto rango
público.
Este hecho resultó una demostración de la necesidad de recuperar un
acontecimiento del pasado cubano del cual poco o nada se dice. Si bien
impulsado por historiadores cubanos y extranjeros, el estudio de la
rebelión de los miembros del Partido de los Independientes de Color, en
mayo de 1912, ha cobrado una centralidad decisiva como suceso necesitado
de esclarecimiento y difusión.
Justo esa es la tarea de 1912: voces para un silencio. Gloria Rolando ha
producido, en alrededor de media década, esta serie de tema histórico y
enfoque didáctico con el propósito de documentar la búsqueda de la verdad
más compleja acerca de qué ocurrió durante aquel remoto y oscuro momento
de la recién creada República burguesa cubana. Sus tres episodios de poco
menos de una hora de duración han encontrado su culminación el pasado
diciembre, cuando la edición de 2013 del Festival Internacional del Nuevo
Cine Latinoamericano de La Habana incluyó en su selección el capítulo
final.
Esta tercera pieza se ocupa de los acontecimientos culminantes; o sea, de
los enfrentamientos que tuvieron lugar en una zona remota de las
provincias de Santiago de Cuba y Guantánamo, durante la primavera de 1912,
luego del alzamiento de decenas de miembros del partido político que un
grupo de veteranos negros y mulatos de la guerra de independencia contra
España quisieron convertir en la voz de los de su clase y raza. La
frustración de los intentos de hacer vida política dentro de los cauces
republicanos, la posterior ilegalización del grupo y, sobre todo, la
segregación que sufrían los de raza negra en la nueva Cuba que habían
ayudado a fundar, hizo a Pedro Ivonnet y Evaristo Estenoz, los líderes del
movimiento, tomar la decisión de volver a las armas.
La serie de Rolando es prolija. Si bien el tercer capítulo es, en alguna
medida, reiterativo y falto de tensión dramática, posee las virtudes en la
elaboración de la argumentación que exhibe la serie toda: vasta
utilización de material impreso de la época (sobre todo periódicos y
fotografías), entrevistas a historiadores e investigadores, además de
algunos testimonios de personas que escucharon de sus padres o vivieron de
jóvenes los sucesos. La indagación sobre el terreno de los acontecimientos
bélicos es un perfil poco explotado en este episodio, como tampoco se
aprovecha como pudiera la historia oral depositada en la región de los
sucesos.
Como producto audiovisual, 1912. Voces para un silencio hace gala de una
argumentación diáfana. El trabajo con la infografía, sencillo y enfático,
consigue iluminar fragmentos de los textos "navegados" por la cámara para
resaltar el tratamiento mediático de asuntos pertinentes al análisis. Las
entrevistas a especialistas suelen componer breves momentos de
declaraciones en cámara, que salpican más que gobiernan la evolución del
razonamiento.
Pero lo más valioso de la estructura argumental es la calidad de la
contextualización de los sucesos climáticos que aquí se relatan. En las
entregas uno y dos de la serie, se establecen los antecedentes históricos
que trajeo consigo este desenlace de siglos de esclavitud y explotación de
la mano de obra esclava traída por la fuerza de África, hasta el inicio de
la guerra de independencia contra España en 1868 y la decisiva
incorporación a esta de los negros y mestizos.
Esa colocación de la "Guerrita del 12" en una línea de larga duración
permite al espectador asomarse a este como apenas un capítulo -terrible,
pero casi marginal- de la segregación del negro cubano y de postergación
de su articulación como fuerza política con valor intrínseco. Por ello se
enfatiza el dato que explica cómo los Independientes de Color no tenían
una plataforma excluyente o puramente racial, sino que exigían derechos
generales para las clases desfavorecidas, como la enseñanza gratuita o la
jornada laboral de ocho horas.
Las refriegas contra los alzados que el tercer capítulo resume hacen
surgir la pregunta de si se trató en verdad de una guerrita o de una
matanza a mansalva. El conflicto en el Oriente agitó los prejuicios
racistas en distintos lugares de la isla, donde se produjeron
linchamientos y asesinatos contra negros y mulatos, por el simple hecho de
serlo. La prensa del momento fustigó con prejuicios eurocéntricos a los
Independientes, tildándolos de salvajes y violentos, azuzando el miedo al
negro de la aristocracia criolla del siglo XIX (no se olvide que, incluso,
un representante ilustrado de los cubanos progresistas como José Antonio
Saco vio con temor la autonomía de la isla respecto de España, debido al
balance demográfico negativo que tendrían los blancos en un país libre de
la tutela colonial), pero también los estereotipos racistas más bajos y
crueles.
1912. Voces para un silencio consigue, no importan sus defectos, poner en
evidencia la herida que sobre la nación cubana permaneció hasta hoy, no
solo porque al final de la batalla sobrevino el olvido y el largo
desconocimiento de los derechos específicos de los de raza negra dentro de
la trama sociopolítica nacional, sino porque el rubor ante los crímenes
legitimados por la violencia fue convenientemente disimulado en el
silencio.
El objetivo de Gloria Rolando es comunicar al presente una historia no
contada, o mal dicha; una historia que pone en evidencia un asunto del
tejido del proyecto nacional moderno que no ha sido corregido ni siquiera
hoy. Preguntarse a partir de sucesos del pasado por qué los cubanos se
enfrentaron entre sí apenas a una década de fundada la República que al
fin nos dejaba libres de España, es señalar que existen cuestiones que nos
desunen, heredadas de nuestro pasado colonial, de la hegemonía de una
ideología clasista que se solapa con cuestiones raciales, y que han hecho
que un área decisiva de la sociedad cubana no haya tenido las mismas
oportunidades que su contraparte de raza blanca.
Dicho de este modo, el de Gloria Rolando es un nuevo mensaje al presente
-hace unas semanas calificaba así a la serie documental Cuba roja, de
Ismael Perdomo. Si se usara en las escuelas de la enseñanza media y media
superior de toda Cuba como material de apoyo a la impartición de la
asignatura de Historia de Cuba, ya habría jugado una función
trascendental. Pero si se utilizara además como vehículo para debatir por
qué los prejuicios raciales siguen lastrando la evolución moral de la
sociedad cubana actual, habría encontrado el cénit de su propósito.
Cuba a todo color
por Ernesto Pérez Chang (marzo 6, 2014)
Alexis es egresado de una escuela de turismo. Durante años
estudió cocina y se graduó con honores. En algunos concursos los maestros
elogiaron su destreza y buen gusto, también la pulcritud y la habilidad de
improvisar e innovar. Sin embargo, al buscar empleo, Alexis no ha tenido
suerte.
Halló trabajo en un deslucido restaurante de Centro Habana pero nunca lo
han dejado pasar de ayudante del cocinero principal. El destino del
muchacho será difícil de cambiar simplemente porque nació con un defecto:
su piel es negra, demasiado oscura.
Odalis tiene una voz potente, majestuosa y una pronunciación impecable. Es
perspicaz y demuestra soltura al conversar. Ama el mundo del espectáculo
y, aunque estudió Comunicación Social en la universidad, su fantasía es
ser animadora de un programa televisivo, una revista variada, sin embargo,
lleva demasiado tiempo leyendo noticias, encerrada en la cabina de radio
de una emisora provincial.
Guarda la esperanza de que alguna vez alguien repare en sus habilidades.
Pero Odalis no es una rubiecita de voz meliflua o una mulata de talle
esbelto, de esas que las publicidades y las ferias de turismo anuncian
como el sello de nacionalidad hecho carne.
Los profesores de Tamara le aconsejan cambiar de rumbo porque en el ballet
clásico pocas veces triunfan los de su color. Tamara no los escucha.
El cabello de Odalis no ondea ni cae por los hombros con la suavidad que
pueden ofrecer algunos genes o un tratamiento capilar a base de keratina.
Odalis es negra y su limitación en la vida es consecuencia de no sentir
vergüenza de lo que es.
Tamara es una niña que sueña con ser Odette, y también Odile, en El lago
de los cisnes. En la escuela, los días de celebraciones, se calza unas
zapatillas cosidas por la madre y danza con júbilo y gracia ante los
estudiantes y maestros. Lo hace bien, casi perfecto para su edad y para no
haber recibido instrucción. Ella es puro talento.
Cierra los ojos y se deja llevar por la música de Tchaikovsky que además
sirve para apagar los comentarios inapropiados dentro del público. Los
profesores le aconsejan cambiar de rumbo porque en el ballet clásico pocas
veces triunfan los de su color. Tamara no los escucha. Ella piensa en un
Sigfrido que no distingue entre el negro y el blanco y por eso tiene en su
cuarto una imagen de Carlos Acosta, solo como resguardo.
Cuando uno recorre el país, de punta a punta, se encuentra con miles de
casos como los de Alexis, Odalis y Tamara. No hay que esforzarse demasiado
para comprobar que en ocasiones las ilusiones y el talento de una parte de
los cubanos terminan por ser aniquilados por el racismo imperante en la
sociedad actual.
Basta con asomarse a cualquier hotel para palpar (sin necesidad de acudir
a las estadísticas) la verdadera distribución de las ocupaciones según el
color de la piel. Es suficiente con recorrer las calles y mirar la tez de
los barrenderos, los constructores, los recolectores de materia prima, los
custodios, los "palestinos". No es del mismo tono que la del gerente, el
barman, el capitán de salón, el general de alto rango, la presentadora de
TV, la azafata.
En las revistas y en los documentales donde Cuba desea ser un producto
exportable los negros aparecen sonrientes, vendiendo frutas, tomando ron o
bailando en rituales mientras los blancos rentan un Mercedes, se fuman un
Habano o se asoman a una terraza luminosa que da al mar azul y a una
franja de arena inmaculada. ¿Será que los negros no reflejan bien la luz
tropical, que es solo un problema de contraste?
Tal vez por ese detalle técnico la televisión cubana es el ejemplo más
vergonzoso. En los programas estelares, en las telenovelas de factura
nacional, en casi todos los espacios es difícil encontrar actores y
animadores negros. En los casos aislados donde aparecen son detectables
los estereotipos del "buen salvaje" en que se basan los creadores, con lo
cual, bajo una apariencia de normalidad, se enmascara la más enraizada
intransigencia. Una conducta hipócrita y burlona tolerada sin
consecuencias.
La voluntad de acabar con el racismo en Cuba no debe reducirse al ingenuo
e inútil cambio de polaridades, al trueque de un color por otro. No sirve
de nada imponer cuotas de empleo o de admisión ni hacer anodinas
declaraciones oficiales en contra de la discriminación racial. Es
necesario reconocer que no se podrá ejecutar una política acertada para
enfrentar el fenómeno, en tanto el gobierno no revise a fondo su propio
discurso, reconozca sus contradicciones (las pasadas y las actuales) y
entienda que los prejuicios raciales están presentes en todos los niveles
de la sociedad, sin excepción.
Rotundamente Negra
por: Shirley Campbell
Me niego rotundamente
A negar mi voz,
Mi sangre y mi piel.
Y me niego rotundamente
A dejar de ser yo,
A dejar de sentirme bien
Cuando miro mi rostro en el espejo
Con mi boca
Rotundamente grande,
Y mi nariz
Rotundamente hermosa,
Y mis dientes
Rotundamente blancos,
Y mi piel valientemente negra.
Y me niego categóricamente
A dejar de hablar
Mi lengua, mi acento y mi historia.
Y me niego absolutamente
A ser parte de los que callan,
De los que temen,
De los que lloran.
Porque me acepto
Rotundamente libre,
Rotundamente negra,
Rotundamente hermosa.
Eloy Machado: "El Ambia", Poeta Oficial (Croniquilla
desde el fondo del caldero)
por Tato Quiñones
Eloy Machado nació en La Habana, el primero de abril de
1940, en un solar que ya no está en el cuchillo en que convergen la
avenida del Malecón y la calzada de San Lázaro. A Eloy más se le conoce
como el "Ambia", vocablo este que -según la sabrosa colección de
cubanismos "El Habla popular cubana de hoy" de Argelio Santiesteban-,
cuenta una sola acepción: Amigo. Pero ese bien merecido apodo es reciente.
Cuando yo lo conocí, al mediar la década de los sesenta del pasado siglo
-han transcurrido casi cincuenta años, ¡quién lo diría!-- a Eloy Machado
se le conocía en los barrios de La Habana como "El Oficial", apodo que le
quedó de los tiempos en que la cogió por decir "oficial que sí" u "oficial
que no" en las conversaciones.
En 1984, cuando contaba ya 44 años bien cumplidos, la editorial de la
Unión de escritores y artistas de Cuba dio a conocer su primer libro de
poesía: "Camán Lloró". Por aquellos tiempos, publicaba yo con cierta
irregularidad alguna que otra croniquilla u entrevista en la sección "Arte
y Literatura" de la revista Bohemia. Una de ellas fue la que me concedió
"El Oficial", cuando todavía no era conocido por "El Ambia", a propósito
de la publicación de su libro, entrevista que -con algunas modificaciones
que me han parecido pertinentes-- reproduzco para ustedes a continuación:
Charlaba yo con un amigo junto a la verja de la UNEAC, hace unos días,
cuando lo vi venir, 17 abajo por el medio de la calle, ligero en los
recios botines de constructor blanqueados por la cal, bruñido el "cráneo
pensador", ancha la sonrisa pícara bajo el bigote mongol. Traía en las
manos una estropeada carpetita de escolar.
-¡Qué volá, ñanga? -fue su saludo.
-¿Qué dice El Oficial? -dije a mi vez.
-¿Que qué digo? ¡Oye la última, boncó!
Dicho y hecho, extrajo de la carpeta un pliego manuscrito con su letra
redonda y desparramada de colegial. Leyó:
Uno, no vale
seis, si vale
dos, no vale
cinco, si vale
tres, no vale
cuatro, si vale.
Así es el juego de la vida.
Ayer fui majá
Hoy soy siló.
Tal Eloy Machado, "El Oficial", "El Ambia", poeta del barrio de Cayo Hueso
que ya lo es de Cuba, luego de la publicación de su primer libro, Camán
Lloró, por la editorial de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba.
Inventor de palabras, creador de giros, expresiones y metáforas
asombrosas, ardua será la tarea para críticos y académicos la valoración
de su poesía, no por inusitada menos auténtica, vigorosa y plena de
popular cubanía, expresión cabal de lo que Don Alfonso Reyes llamó "el don
primitivo de plasmar la lengua que sólo el pueblo posee".
Por mi parte, simple cronista y amigo del poeta desde endilanga (voz conga
aplatanada en Cuba que quiere decir "hace mucho tiempo") me limitaré aquí
a reseñar uno que otro hecho que lo defina, y a reproducir, tal cual, sus
respuestas a las preguntas que, cómodamente sentados en sendos butacones
del desierto portalón de la UNEAC, le formulé aquel día de nuestro
encuentro.
Mi infancia -me dice- fue desastrosa en el aprendizaje de la vida; mi
infancia fue mucho más col que lechuga. En la escuela sólo llegué al
segundo grado. El momento más grato que recuerdo de mi niñez fue aquel
cuando, demandada mi familia y al borde del desahucio, me encontré doce
pesos en la calle, con los que pudimos pagar el alquiler del cuarto. ¿El
más triste? Aquella noche cuando buscábamos un portal para dormir y el
policía de posta nos dijo que si volvía a vernos merodeando nos mandaría
para el albergue de indigentes.
En su prólogo a Camán Lloró, el también poeta y narrador Efigenio
Ameijeiras Delgado, quien fuera jefe del contingente de constructores del
hospital Hermanos Ameijeiras -en el que El Oficial trabajaba como soldador
y ayudante de albañil-- narra como Eloy comenzó a escribir poesía:
Ambia jamás en su vida había escrito un poema. Hace pocos años, se pueden
contar con los dedos de la mano, en la obra en construcción del hospital
de Centro Habana, un grupo de compañeros formamos un taller literario al
que pusimos de nombre Rubén Martínez Villena. Un día le preguntamos a
Ambia si quería participar en el taller. Aceptó gustoso. Como es natural,
nos reunimos para leer y analizar nuestros cuentos, poemas, etcétera.
Froilán Escobar, que dirigía el taller, le dijo:
-Ambia, haz un poema para que participes.
-Sí, sí, mi ambia; me gustaría mucho -le contestó. Pero yo nunca he hecho
un poema.
-No importa. Aquí muchos empezaron por el primero. Mira, por ejemplo,
Angelito, Capey, Nelson...
Al día siguiente, con un mocho de lápiz y un pedazo de papel cortado de un
saco de cemento, mientras trabajaba de ayudante albañil, escribía.
Nos entregó un "engome"[1] [2] que parecía hecho por un faraón de la
primera dinastía. Con su ayuda, Froilán lo descifró y pudo pasarlo a
máquina. Fue como si aquel papel sucio lo tocara una varita mágica. Le
gritamos:
-¡Ambieco, qué bárbaro, has hecho un poema!
-Entonces supe que era poeta -me diría El Oficial aquella tarde en el
portal de la UNEAC-. Yo era un poeta que no sabía que lo era. Desde aquel
día no he parado de escribir. Yo no tengo hora para hacer la poesía. La
poesía siempre está conmigo, dentro de mi ser. A veces ando por ahí y de
pronto se me ocurre un verso y le pido un trozo de papel y un lápiz a un
bodeguero, o a cualquiera, me arrodillo en la acera y lo escribo. Cuando
trabajo, cuando camino por la calle, cuando converso con los socios,
cuando canto rumbas, siempre estoy componiendo un poema. También ocurre
que me despierto de madrugada, me despierto no, me despiertan los versos y
tengo que sentarme a escribirlos. Eso es maravilloso, y me hace sentir
bien, realizado, orgulloso de mí mismo, porque sé que de alguna manera
estoy contribuyendo a que la gente se interese y guste de la poesía. En el
barrio, cuando empecé a escribir, llegaba a la esquina de Aramburu y San
José, o al Parque de Trillo, leía mis poemas y la gente no me hacía mucho
caso. Pero insistí hasta que logré que la gente se viera reflejada en
ellos, porque tenemos una historia, que es la misma, la misma esperanza, y
la misma lucha, que es de clases, mi ambia. Entonces me escuchaban con
atención y me pedían que leyera más y más. Posteriormente comencé a leer
en los Sábados de la Rumba que organizaba el Conjunto Folclórico Nacional,
ante un público mucho más numeroso y exigente con el que me comunicaba
siempre. Esa es la mayor satisfacción, la mejor recompensa que puede
recibir un poeta, o cualquier artista, por su trabajo.
-La poesía, a mi entender -me dijo Eloy- sirve para muchas cosas: sirve
para aprender a diferenciar la verdad de la mentira, educa, alegra,
entristece, encabrona y hace pensar, sobre todo eso. Y yo pienso que la
poesía hay que leerla no solamente donde haya un público culto y
preparado. ¿Por qué los poetas no hacen recitales en el Parque de Trillo,
o en el de San Juan de Dios, o en el de Jesús María? Mi experiencia
demuestra que eso puede hacerse con magníficos resultados. En los barrios
hay mucha gente que respeta y gusta de la poesía. Claro, hay poetas que
miran por arriba de la nariz, que están en una onda ensayística y
paisajística y que no llaman al pan pan y al vino vino. Esos mejor que ni
se asomen por los barrios, no por la gente, sino por ellos mismos, que se
van a sentir mal.
Para terminar, le pregunté a Eloy que vendrá después de Camán Lloró.
-He terminado un nuevo libro que titulé Vagón de Mezcla, que espero tenga
igual aceptación que el primero. Escribo sin parar. Hace sólo unos pocos
años que yo escribo poesía, ambia, pero soy poeta desde siempre. Lo que
pasa es que no lo sabía.
Treinta después de aquella conversación, la semana pasada, en la misma
UNEAC, en ocasión de celebrarse en el "Hurón Azul" -el bar de la
institución- la peña quincenal de rumberos que lleva su nombre y Eloy
anima, conversé largo y tendido nuevamente con el "El Ambia", otrora
llamado "El Oficial", sobre aquel primer libro y los que vinieron después.
Así, supe que en 1991 la editorial Letras Cubanas dio a conocer Jacinta,
Ceiba Frondosa, dedicado a su difunta madre; en 1995, la editorial de la
UNEAC publicó "Callejón del Suspiro" y en 1998 "Vagón de Mezcla". "Soy
Todo" apareció en 1999 en Buenos Aires y "Otán la Ocha" en el 2000 en
Bogotá.
-¿Y sigues escribiendo? -le pregunté.
-Pues claro, mi ambia, oficial que sí. Oye este que va y te gusta. Se
llama "Una Tuba intelectual"
Dicho y hecho, abrió una pequeña carpetita en la que lleva siempre consigo
un puñado de sus poemas aun por publicar, esta vez pulcramente
mecanografiados. Leyó:
Esa noche en ese cacureco
se achantaban en talla original
Lengua dulce, Hueso el italiano
Wichi el Negro, Tato Quiñones
Leonardo Acosta, Sobrino,
el poeta sinfónico, Pablo Milanés el canta autor
y otros entendidos de la circunstancia
valorando si las palabras: ambos mundos
hacían como chéveremacunchévere
o no.
Existía una filosofía
entre esos hombres
la sagrada familia
considerando otras miradas
que no descubrían
el cielo de la vida con la boca;
sin embargo, sabían andar
por el pasillo de cuantas noches pasaban.
La vara medidora era la edad,
en ese concepto iban de su mano
como si jugaran al siló.
Aquellos hombres de pesares
acaso eran libres de verdura, aserecó
Y hasta más ver, ambia lector… y lectora
Invitación del Capítulo cubano de
la Articulación Regional Afrodescendiente para América Latina y el Caribe,
18 de marzo, 2014
La Articulación Regional de los Afrodescendientes de América Latina y el
Caribe (ARAAC), capítulo cubano, con motivo del Día de la Lucha contra el
racismo, presentará un panel que debatirá sobre ese tema en Cuba, a partir
del 55 Aniversario del discurso de Fidel, en marzo de 1959, llamado la
Cuarta Batalla. De igual manera, en el marco de la actividad, se le
rendirá homenaje a Gerardo Fulleda León, a propósito del Premio Nacional
de Teatro, que le fue entregado recientemente.
El Panel se realizará el próximo martes 18 de marzo, a las 2.00pm, en la
Casa del Alba Cutural, sita en calle línea entre C y D, Vedado.
EL PANEL ESTARÁ INTEGRADO POR
Ma. Carmen Barcia.
Tato Quiñones.
Sandra Paul.
Reynaldo González. Moderador.
Convocatoria al VII Coloquio Internacional sobre Investigaciones de las
Religiones Afroamericanas.
"Jesús Rafael Robaina Jaramillo"
21 al 23 de mayo del 2014.
Segunda Circular
Estimados colegas:
El Instituto Cubano de Antropología, a través de esta circular, se
complace en invitar a todos los antropólogos, especialistas,
investigadores afines, estudiosos y religiosos, a participar en el VII
Coloquio Internacional sobre Investigaciones de las Religiones
Afroamericanas que se realizará en La Ciudad de la Habana, en la sede del
Instituto del 21 al 23 de Mayo del presente año.
El VII Coloquio persigue consolidar un espacio para el intercambio de
conocimientos y experiencias, acerca de investigaciones y estudios que
tienen como foco la diversidad de formas religiosas, religiones y modos
culturales de antecedentes africanos registrados en América como
consecuencia del proceso colonial. En esta oportunidad enfocaremos el
debate hacia la influencia de las religiones de origen africano en las
diferentes manifestaciones artísticas, el discurso científico, médico y
mediático. A su vez se persigue ahondar en la necesaria contextualización
de estos complejos religiosos en los espacios geográficos que abarcan.
Articularlos con la realidad económica, social, cultural y ambiental que
les rodea, a manera de establecer nociones que permitan generar
conocimientos sobre el desarrollo de un equilibrio biosicosocial, que
refuerce la relación ser humano-naturaleza.
Constituye una oportunidad para construir diversos espacios para la
reflexión y el debate entre estudiosos, religiosos e investigadores del
patrimonio cultural contenido en las religiones y la praxis cultural de
estas creencias.
Asimismo permitirá iniciar acercamientos dialógicos sobre la cultura
religiosa que se desarrolla actualmente en diferentes latitudes. Propiciar
marcos de integración a nivel del área regional en que vivimos,
convencidos de que el desarrollo de capacidades cognoscitivas que superen
discriminaciones y estereotipos podrá constituirse en un punto estratégico
para el trazado de una política integradora y de naturaleza propia.
Contenidos Temáticos:
• Las religiones de origen africano y su imbricación en el contexto de la
sociedad cubana actual.
• Representación y ¿religiosidad múltiple? Un solo sujeto y varias
prácticas religiosas.
• Ortodoxia y Transculturación en las Religiones Afroamericanas. Un
regreso a África desde raíces criollas. Problemas y alternativas actuales.
• La imagen mediática y el discurso actual sobre las religiones
Afroamericanas y sus prácticas.
• Las prácticas religiosas y culturales de influencia africana en América
y su relación con las nuevas tecnologías. Los TIC´s, imagen y problemas
sociales que encierran.
• La investigación científica aplicada a los estudios de género y la
masculinidad en las prácticas religiosas de origen africano en América.
• Proyectos o acciones dirigidas a la educación y capacitación para la
preservación y rescate del Patrimonio Cultural Afroamericano.
• Medio Ambiente en la práctica cultural afroamericana. Problemas y
alternativas actuales.
• El arte y las manifestaciones artísticas. Su acercamiento a la
problemática religiosa de origen africano ¿Creación o reflejo de la
religión?
• Música y musicología asociadas a las religiones de antecedente africano
en Cuba.
• Psiquis, Espiritualidad, rituales y estados de conciencia. Las ciencias
de la mente humana en un acercamiento a estas manifestaciones.
• Transnacionalización y difusión de las religiones afroamericanas. Casos
de estudio en la antropología situacional.
COMITÉ ORGANIZADOR:
Presidente: Lic. Estrella González Noriega Vicepresidente: Lic. Gerardo Izquierdo Díaz Secretario: Isis Fernández Artíles Miembros: MSc. Pablo Rodríguez Ruiz MSc. Indira Mones Guevara Lic. Soledad Sotolongo Sánchez. Lic. Maykel Lavarreres Chávez Tec. María Luisa Serrano Camejo. Tec. Anabel Hernández Acosta
Modalidades de presentación:
Conferencias magistrales de 45 minutos (por invitación), Paneles,
Presentaciones libres, Carteles, Videos (15 minutos).
Formato de presentación de resúmenes y ponencias:
Títulos y Autores: El título del trabajo y el área temática deben estar
centrados encabezando el trabajo (resaltar títulos en negrita). Abajo,
justificado a la derecha, el nombre del autor o autores, el grado
científico, la institución o programa que auspicia el trabajo y la
dirección electrónica.
Los Resúmenes: Se presentarán para las exposiciones orales, gráficas o
video y no deberán exceder las 200 palabras. Estos se enviarán a la
Comisión Organizadora, hasta el 28 de febrero de 2014, mediante los
correos del VII Coloquio.
Extensión de la Ponencia: Los trabajos presentados deberán tener como
máximo una extensión de 20 páginas (incluyendo gráficos, fotos y
bibliografía).
Formato de ponencias y resúmenes: Los mismos serán enviados escritos en
Word, compatibles con Office 97/2003, o superior hasta 2010. Las hojas
deberán ser de tamaño carta con un espacio de 2,5cm. por sus cuatro
márgenes. Los textos serán presentados en letra tipo Times New Roman, 12
puntos, resaltar títulos en negrita, texto justificado, con un espacio
interlinear de 1,5.
Láminas, gráficos y fotos: Se permitirá un máximo de 2 páginas de
gráficos, láminas y fotos. Dicho material será anexado como archivo JPG.
Para participar en el Coloquio es requisito indispensable presentar las
ponencias completas y deberán ser entregadas hasta el día 30 de marzo del
2014. No habrá plazo de prórroga. Sólo será admitido una ponencia y el
mismo número de cartel por autor, sea individual o colectivo.
Presentación oral:
La ponencia deberá ser expuesta en un tiempo riguroso de 15 minutos y la
discusión se efectuará en 5 min. El uso de proyectores de diapositivas,
transparencias y acetatos, así como el data show o cañón tiene que
solicitarse con anticipación.
Exposición gráfica:
La exhibición de los carteles no se desarrollará simultáneamente con las
mesas de comunicación.
Sección de videos:
Se proyectarán los distintos videos relacionados con las temáticas del
Coloquio. La exhibición de los videos se desarrollará simultáneamente con
las mesas de comunicación y deberán cumplir con la norma NTSC 3.58 Mhz.
Los videos deberán entregarse igualmente en la fecha tope de admisión. De
lo contrario el Comité Organizador no se responsabiliza con alguna falla
que pueda presentarse.
INSCRIPCIÓN:
Los costos de inscripción serán de $100.00 tanto para los profesionales
como para los estudiantes. La inscripción incluye la acreditación con
diploma de participación, la papelería y la participación en las
actividades colaterales al evento y los coffe-break. Los participantes
cubanos abonarán su cuota en CUP y los extranjeros en CUC.
Los resúmenes deben ser enviados, junto con el cupón de inscripción, por
correo electrónico, especificando VII Coloquio a: antropol@ceniai.inf.cu;
coloquioican7@ican.cu o mones@ican.cu .
CARTA DE INVITACIÓN:
Se les enviará carta de invitación a las personas que lo soliciten. Esto
no significa intención alguna por parte de los organizadores de
proporcionar ayuda financiera, sino acreditar a los participantes de su
asistencia para la obtención del visado o una petición personal de ayuda
económica en los lugares de origen o permiso en sus respectivos puestos de
trabajo.
Instituto Cubano de Antropología. Calle Amargura 302 entre Habana y
Aguiar, Habana Vieja, CP 10100, teléfonos 860 7036, 860 7816,860 7824.
Racismo en Alemania por Rosalía Sánchez
Tomado de "Blogoterráqueo" de El
Mundo de Madrid, 26.02.14
Los judíos ricos que quieren dominar el mundo constituyen una amenaza.
Este axioma fue manejado por Hitler y sigue despertando hoy en día
tremendas suspicacias. El diario alemán Süddeutsche Zeitung, a propósito
de la compra de WhatsApp por parte de Facebook, ha publicado una viñeta en
la que un pulpo con la cara del multimillonario propietario de la empresa
compradora, Mark Zuckerberg, extiende sus numerosos tentáculos hasta
introducirlos en todos y cada uno delos ordenadores y teléfonos móviles
que le rodean. La polémica ha surgido por los rasgos, sin duda exagerados,
que caracterizan al personaje: nariz aguileña, mentón prominente, cara
enmarcada en bucles... Hasta el director del Centro Simon Wiesenthal en
Jerusalén, Efraim Zuroff, se ha rasgado las vestiduras ya ha dicho que
"esa caricatura, sin duda, huele a antisemitismo... Está claro que el
dibujante quería destacar que Zuckerberg es judío", basándose en su
relación visual con la propaganda nazi antisemita de 1938.
Calificar de antisemita a un diario como Süddeutsche Zeitung es
seguramente ir un par de pueblos más allá de la correspondencia con la
realidad y prueba de ello es que sus responsables pidieron perdón en
Twitter y retiraron la caricatura apenas surgieron las primeras quejas, no
sin cierta extrañeza. El caricaturista Burkhard Mohr se declara
"conmocionado" y ha emitido un comunicado en el que aclara que "el
antisemitismo y el racismo son ideologías que me son completamente ajenas.
Por ello me consterna que mis caricaturas sean entendidas en este
sentido". Pero no está de más anotar que este incidente no es aislado, que
en Alemania se registran al año unos 16.000 delitos con motivación racista
y que las autoridades europeas se preocupan por la ligereza con la que la
sociedad alemana contempla en su seno el racismo y la xenofobia.
Alemania, por ejemplo, sigue sin ratificar el Protocolo nº 12 de la
Convención Europea para los Derechos Humanos, que establece la prohibición
general de la discriminación. Las autoridades alemanas siguen teniendo
reparos a la hora de dejar de hacer distinciones sobre la base de la
nacionalidad, por ejemplo en relación con beneficios sociales cuya
aplicación es contraria al Protocolo nº 12.
Los motivos racistas no han sido incluidos en el Código Penal alemán como
circunstancia agravante de un delito. Dos iniciativas a tal efecto fueron
bloqueadas en 2008 y en 2012 por la cámara parlamentaria del Bundesrat. Y
según una apreciación del Consejo Europeo, el odio y la incitación al odio
disfrutan en Alemania de "un considerable grado de impunidad", según ha
informado el semanario Der Spiegel. Los colegios alemanes, advierte un
informe del Comité del Consejo de Europa contra el Racismo y la
Intolerancia, constituyen un alarmante semillero de odio basado en la raza
y en la orientación sexual, sin que haya una estrategia federal que aclare
esos temas y estipule tolerancia.
La Ley de Igualdad en el Trato (AGG) alemana no menciona explícitamente
los criterios de lengua y nacionalidad como motivo de discriminación
punible, una ligereza normativa que sufren hoy muchos niños españoles en
sus colegios alemanes, en los que sufren discriminación incluso por parte
del profesorado y de otros alumnos a causa de que, todavía recién
llegados, no saben hablar correctamente el alemán.
Según datos de los que dispone el Ministerio de Interior alemán, uno de
cada siete adolescentes alemanes, un 14,4%, se consideran como "muy
racista frente a los extranjeros", y un 30% respondió afirmativamente
cuando le preguntaron si hay demasiados extranjeros en Alemania, según el
informe "Jóvenes en Alemania como responsables y víctimas de la
violencia". Esta encuesta también señala que el 5% de los 44.600 jóvenes
de quince años encuestados es miembro de un grupo de extrema derecha y que
un 6,4% de los adolescentes varones tienen puntos de vista antisemitas.
La proporción mayor de neonazis se encuentra en el este de Alemania, la
antigua zona comunista, donde más del 14% de los participantes en el
estudio se mostraban inclinados a mirar el Holocausto como "no horrible",
mientras que un número similar creía que los judíos, por su
comportamiento, no fueron totalmente inocentes.
El Consejo europeo ha advertido que en la actualidad el término racismo se
interpreta a menudo de forma demasiado estrecha en la legislación alemana,
que lo utiliza solamente en relación con grupos organizados, de tipo
neonazi, sin advertir su presencia en las relaciones sociales más
generalizadas. Por todo esto las autoridades europeas aconsejan al
gobierno de Berlín hacer más por combatir la discriminación contra las
minorías y por lograr que el racismo sea considerado como tal.
Seguramente, la viñeta sobre Zuckerberg mencionada al principio de este
artículo y que ha llevado a judíos de todo el mundo a constatar que el
racismo campa hoy en día en Alemania, tiene menos que ver con todas estas
consideraciones que con el hecho de que Alemania haya recibido con enormes
reticencias la compra de WhatsApp. Un regulador alemán de la privacidad en
las comunicaciones ha llamado incluso al boicot asegurando que la política
de privacidad de Facebook y Whatsupp lleva a que los datos de los usuarios
estén totalmente protegidos. Pero hay hechos trágicamente palpables que
obligan a este país a mirarse en el espejo de sus miserias. Actualmente se
lleva a cabo el juicio a la célula terrorista nazi NSU, que durante diez
años ha estado llevando a cabo asesinatos xenófobos impunemente, por todo
el territorio alemán, sin ser siquiera perseguida. Ante tal evidencia, el
gobierno prepara una reforma legal que endurezca las penas contra el
racismo, pero hasta que la reforma no entre en vigor, las víctimas de
actos motivados por el racismo y la xenofobia en Alemania continúan
indefensas.
Mensajes recibidos en "Desde La Ceiba"
Tato, el negro y el rojo son colores que no combinan bien. Y ya tu debías
estar convencido de esto, después de cinco décadas y media de falta de
libertades, consignas vacías, UMAP, alumbrones, ciudades en ruinas,
guaguas que no pasan, solares eternos, derrumbes, taxistas, camareros y
putas universitarias, fracasos económicos, sociales y de todo tipo,
familias divididas, pateaduras a mujeres pacíficas y otros manjares del
menú castrista; contando con las tan cacareadas escuelas sin materiales
escolares, bodegas sin comida y hospitales sin medicinas, sábanas ni
bombillos. Los negros -pa' variar- son los primeros perjudicados, y esa
canción tu te la sabes en todos los tonos. Le comenté a nuestro amigo común Nicolás Reinoso que te había escrito
varias veces, después de haber encontrado con alegría tu dirección en una
larga lista de correos que alguien me enviaba. Le conté que jamás me
habías contestado y que después de varios años, ahora me mandabas
panfletos Afro-Marxistas... ¡Y yo que te creí siempre un hombre
inteligente!
-El Tato es mamey-, me contestó el Negro Nicolás, y la simple respuesta
de nuestro viejo y dulce amigo me recordó aquella vez que, después de
haberlo humillado tanto, el Atorrante en Jefe se refirió a Blas Roca como
"un hombre bueno", a lo que el escritor exiliado Roberto Luque Escalona
respondió con una sabia pregunta: -¿Cómo puede ser bueno alguien que
sirvió a tres dictaduras?-
Feliz Navidad, Tato:
Paquito D'Rivera
Hola Tato, gracias por compartir conmigo este Boletín, es muy bueno que el
tema racial tenga un espacio en este Boletín es sano que salga a relucir
pues a mi criterio aún hay casos aislados de racismo en diferentes
esferas, lo que sucede que se manifiesta de manera distinta, incluso hasta
veces de forma hiriente, de reprobación. Este tema para nada amerita que
esté en silencio, al contario hay que darle voz propia al tema,
independientemente de que en los años que lleva la Revolución ha logrado
generar en nuestro pueblo una conciencia muy diferente s de haces muchos
años atrás. Le confieso algo sin que me quede nada por dentro para mi no hay colores
tan solo hombres y mujeres que se resumen en seres humanos con todos los
derechos y deberes, aunque no sea de piel mestiza me siento dolido con
ciertas actitudes negativas discriminatorias. Espero que me permitan ser partícipe de su llamado a la No discriminación
racial, por favor le agradecería que me sigan enviando artículos de esta
índole, cuenten conmigo para lo que sea necesario. Saludos, Frank.....
No se como ha llegado a mi correo esta asociación solo se que me sumo ya
que como negra profesional tengo experiencias que contar y sembrar el amor
Mariana
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[1] [2] Pliego escrito, documento, es voz popular derivada del vocablo
ngomo, que en la lengua ritual de los abakuá designa al yeso con el que se
trazan las "anaforuanas", símbolos ideográficos mágicos de recordación y
evocación.
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